Una gran cantidad de datos de la masonería uruguaya fueron filtrados, entre los que se encuentran «documentación confidencial, videollamadas de Zoom, direcciones de logias y rituales en diferentes grados». Así lo informó la empresa especializada en ciberseguridad Birmingham Cyber Arms LTD.
El hallazgo fue hecho por el usuario de la red social X @criminalmambo y, en un principio, se creyó que se trataba del mismo actor u organización que estuvo detrás del hackeo a la web de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia) y a un sitio de Buquebus.
La filtración ocurrió en un contexto de continuos ciberataques a instituciones y sitios oficiales del Estado. “En esta ola de incidentes de ciberseguridad hasta ahora no hemos detectado ingresos a sistemas internos del Estado”, dijo a Telenoche el director ejecutivo de la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento, Daniel Mordecki, que advirtió de “un fenómeno nuevo” para Uruguay.
La captura difundida el 31 de marzo pasado sobre las filtraciones de la Masonería, bajo el título de «Masoneríafiles», apunta que las carpetas contienen datos sobre «miembros, expulsiones, candidatos y logos de logias».

Captura de la información filtrada.
Las sospechas del filtrador interno
La Gran Logia de la Masonería del Uruguay emitió un comunicado interno luego de la filtración. En el texto, se asegura que existe una “página web que tiene contenidos públicos y un acceso exclusivo para miembros de la orden”. “A diferencia de lo que circuló en la prensa, la página no fue hackeada ni modificada en su contenido”, indica el comunicado al que accedió el diario uruguayo El Observador.
“Al revisar los registros de acceso a nuestros servidores web y las herramientas de monitoreo, no se encontraron vulneraciones ni nada anormal. No hubo intentos repetidos de ingreso y no se detectó un tráfico fuera del habitual, ni un incremento de este”, informaron en el comunicado.
Hace pocas horas, el semanario Búsqueda informó basándose en una fuente de la institución que, tras el descubrimiento, la Masonería se comunicó con el culpable para advertirle que será sujeto a un juicio interno. El hecho no fue denunciado ni en la Fiscalía ni en la Policía, aunque un abogado masón sí dio cuenta formal de la situación al Poder Judicial mediante un escrito en el que informó brevemente lo sucedido.
Entre los órganos que rigen y administran la Masonería del Uruguay se encuentra el Tribunal Masónico, compuesto de tres miembros titulares y tres suplentes. Según los estatutos de la logia, aprobados en 1999 por el Ministerio de Educación y Cultura, el Tribunal Masónico constituye el órgano de juzgamiento de las faltas de carácter masónico y de las acusaciones contra los miembros de la hermandad. La sanción máxima a la que se someterá el responsable de la filtración es la expulsión de la logia. Las fuentes añadieron que, de encontrarse indicios de que cometió un delito, se dará cuenta a la Justicia penal
Con información de El Observador y Búsqueda.