Las finanzas de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días enfrentaron un debate renovado este domingo cuando la cadena CBS transmitió una entrevista con un exasesor de inversiones de la iglesia, David Nielsen, que describió en el programa «60 Minutes» la cartera de inversiones del organismo religioso como «un fondo de cobertura clandestino», con el fin de ocultar miles de millones de dólares y que violó su estado de exención de impuestos.
“Esos fondos no se usaron de la forma en que fueron asignados para ser usados… Bueno, una vez que el dinero entró, no salió”, agregó.
Aunque las acusaciones de Nielsen ya habían sido ampliamente publicitadas, el segmento del programa de televisión de alto perfil podría dañar la imagen pública de la iglesia.
David Nielsen dejó su trabajo en Ensign Peak Advisors, la firma de inversión de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y presentó una denuncia a la IRS.
Un líder de la iglesia se negó repetidamente a responder las preguntas de Sharyn Alfonsi de CBS durante el segmento sobre cuánto dinero tiene y dudó cuando se le preguntó por qué la iglesia guarda secretos sobre sus finanzas.
Históricamente, la iglesia mormona ha ocultado detalles de sus finanzas no solo al público, sino también a sus miembros.
En 2019, Nielsen presentó una denuncia ante los reguladores federales de Estados Unidos alegando que el brazo de inversión de la iglesia, Ensign Peak Advisors, abusó de su estado de exención de impuestos al recaudar miles de millones de dólares sin gastar nada en obras de caridad.
Sin embargo, gastó US$ 2.000 millones combinados en negocios con fines de lucro propiedad de la iglesia, dijo Nielsen.
También dijo que la iglesia creó 13 compañías fantasma para dividir sus inversiones y ocultar la verdadera escala de su riqueza.
Después de que la SEC determinó que la iglesia ocultó sus activos durante 20 años, la iglesia y Ensign Peak acordaron en febrero pagar un acuerdo de US$ 5 millones.
Nielsen, quien trabajó para Ensign Peak durante aproximadamente 10 años a partir de 2009, proporcionó documentos contables que mostraban que la iglesia tenía US$ 100.000 millones en inversiones a partir de 2018, informó el Washington Post en 2019 .
Cuando se le pidió que confirmara las estimaciones actualizadas de $150 mil millones, Christopher Waddell, un líder de la iglesia que ayuda a supervisar las finanzas, le dijo a Alfonsi: «Eso es algo que no puedo compartir contigo en este momento».
Cuando Alfonsi preguntó si eso estaba «en el estadio de béisbol», Waddell respondió: «Um, tenemos recursos significativos».
Waddell dijo que la iglesia no revelará su valor total «porque entonces todos nos dirían qué quieren que hagamos con el dinero».
La iglesia dice que gastó más de mil millones de dólares en ayuda humanitaria el año pasado.
Nielsen dijo que durante su tiempo con Ensign Peak, observó que la firma de inversiones de la iglesia «se hacía pasar por una organización benéfica», eludiendo lo que serían miles de millones de dólares en impuestos falsificando registros y, en general, engañando a otros creyentes de la fe mormona.
Cada año, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días recaudó aproximadamente US$ 7.000 millones de sus 17 millones de miembros a través de una práctica conocida como diezmo, en la que los miembros entregan alrededor del 10 % de sus ingresos a la organización religiosa.
Alrededor de mil millones de dólares del dinero recaudado se colocaron en un fondo de reserva en Ensign Peak, que está registrado como una organización sin fines de lucro, y se invirtieron, con ganancias crecientes libres de impuestos.
“Pensé que íbamos a cambiar el mundo”, comentó Nielsen. “Simplemente hicimos crecer la cuenta bancaria”.
