Amnistía Internacional confirmó mediante un comunicado emitido ayer, que estará presente en la audiencia de extradición de Julian Assange, el próximo 20 de mayo en Londres, mediante la presencia de su asesor jurídico Simon Crowther, quien se presentará ante el tribunal en calidad de observador jurídico experto.
Crowther fue quien se refirió con preocupación al caso del periodista australiano al manifestar que, “A medida que el tribunal se reúne nuevamente para determinar el destino de Julian Assange, repetimos las enormes repercusiones que están en juego si es extraditado a los Estados Unidos: el riesgo de que sea sometido a violaciones de derechos humanos y el daño duradero que se causaría a la libertad de prensa de los medios de comunicación globales”.
El asesor jurídico de Amnistía Internacional, profundizó respecto a los riesgos de que Assange sea extraditado a los Estados Unidos: “Si es extraditado, Assange enfrenta potencialmente decenas de años de encarcelamiento y el riesgo de un aislamiento prolongado en una prisión de máxima seguridad con servicios de salud deficientes. Su seguridad y bienestar simplemente no pueden garantizarse, del mismo modo que Estados Unidos no ha respetado los derechos de decenas de miles de personas actualmente encarceladas en Estados Unidos. Assange ya ha pasado cinco años en prisión en el Reino Unido , muchos de los cuales han sido arbitrarios”.
Marcha por Assange con la presencia de su esposa Stella y el exjuez español, Baltazar Garzón.
Crowther también fue muy crítico con la postura de los Estados Unidos, defendió la labor periodística del fundador de WikiLeaks y pidió por su liberación: “Las autoridades de Estados Unidos parecen empeñadas en convertir a Assange en un ejemplo por exponer sus presuntos crímenes de guerra, en lugar de defender los valores de la libertad de expresión. Recibir información gubernamental confidencial de fuentes externas y publicarla en interés público no es un delito. Se trata de actividades fundamentales para el trabajo de periodistas y editores. El público tiene derecho absoluto a saber si su gobierno está infringiendo el derecho internacional. Estados Unidos debe retirar todos los cargos contra Assange y el Reino Unido debe detener el procedimiento de extradición, lo que permitirá su pronta liberación de la custodia estatal del Reino Unido”.
El comunicado de Amnistía Internacional.
El juicio de extradición
El próximo 20 de mayo se llevará adelante la audiencia que determinará si Julian Assange podrá seguir defendiendo su caso ante los tribunales del Reino Unido, será extraditado a los Estados Unidos, donde podría ser condenado a 170 años de prisión por divulgar información de inteligencia sobre crímenes de guerra; o podrá apelar su caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
