Por Guillermo Collini-
El presidente colombiano, Gustavo Petro, acusó a Ran Gonen, director de seguridad global de la empresa de ciber seguridad israelí NSO Technologies, por lavado de activos.
NSO es la fabricante del software espía Pegasus, que ya cuenta con varias denuncias por ser utilizado para tareas de espionaje a periodistas, políticos opositores y activistas en varios países del mundo. Algunas de esas denuncias se dieron a raíz de filtraciones, como las de los Guacamaya Leaks o Proyecto Pegasus.
Sobre la denuncia, el mandatario colombiano dijo: «Creo que el señor director de NSO Group, el señor Ran Gonen, ha cometido un delito en Colombia, porque en Colombia no es posible que ningún ciudadano, ni nacional ni extranjero, porte dinero en efectivo en una cantidad tal como 5 millones de dólares”.
Según detalló públicamente el presidente: “En julio-agosto de 2021, antes de las campañas, un banco israelí reportó una actividad inusual: 5.500 millones de dólares en efectivo en la cuenta de una empresa. Este pago estaba relacionado con un acuerdo por 11 millones de dólares firmado entre NSO y la Dirección de Inteligencia Policial de Colombia (DIPOL) para la compra de Pegasus. La DIPOL adquirió este software para espiar celulares durante el estallido social y antes de las campañas. El dinero fue transportado por vía aérea desde Bogotá a Tel Aviv el 27 de junio de 2021, declarado en la aduana israelí y depositado en la empresa el 30 de junio de 2021″, explicó.
El mandatario colombiano también se hizo varias preguntas sobre la adquisición del dispositivo y el objetivo de su compra.
“¿Cómo es posible que 11 millones de dólares en efectivo salieran del país en aviones desde oficinas estatales hacia Israel para comprar un software que espía comunicaciones y celulares privados, quizá de políticos, durante meses, del principal partido de oposición que finalmente se convirtió en la fuerza política del país? ¿A quiénes más interceptaron? ¿Con qué orden judicial? ¿De dónde salió ese dinero? ¿Por qué no se incluyó en el Presupuesto Nacional ni en las oficinas de transacciones? ¿Estamos ante un lavado de activos desde nuestro propio Estado para interferir en las comunicaciones de quiénes?”.
Petro también dijo en esa misma alocución de principios de septiembre, que ordenó que se lleve adelante una investigación para localizar el software espía, dentro o fuera de la DIPOL y aseguró que, “La investigación debe ser liderada por la Fiscalía, mediante una auditoría forense, para que se conozca la verdad. Y llegaremos a ella”.
Las filtraciones ligadas a Pegasus
Guacamaya Leaks
El 29 de septiembre de 2022, el periodista mexicano Carlos Loret de Mola anunció en su noticiero que había recibido seis terabytes de datos filtrados de la Secretaría de la Defensa Nacional de México (SEDENA). La filtración, obtenida por el grupo de activistas Guacamaya, contenía comunicaciones internas y documentos de los servidores de correo electrónico del ejército de 2010 a 2022.
La información filtrada, entre otras cosas, da cuenta del uso militar del software Pegasus para intervenir teléfonos y su despliegue contra periodistas, activistas de derechos humanos y funcionarios gubernamentales.
Proyecto Pegasus
El Proyecto Pegasus es una investigación colaborativa realizada en 2021, en la que participaron más de 80 periodistas de 17 organizaciones de medios de comunicación de 10 países bajo la coordinación de Forbidden Stories, organización sin fines de lucro de medios de comunicación con sede París, y con el apoyo técnico de Amnistía Internacional, que realizó análisis forenses punteros de teléfonos móviles para identificar rastros del software espía.
A partir de los datos filtrados y sus investigaciones, la asociación de medios detectó posibles clientes de NSO en 11 países: Arabia Saudí, Azerbaiyán, Bahréin, EAU, Hungría, India, Kazajistán, Marruecos, México, Ruanda y Togo.
La investigación identificó al menos a 180 periodistas de 20 países que fueron seleccionados como posibles objetivos de ataques con el software espía de NSO entre 2016 y junio de 2021.
El Proyecto Pegasus identificó que, sólo en México, al menos 25 periodistas fueron seleccionados como objetivos durante un periodo de dos años, mientras que en India fueron 40 los trabajadores de prensa espiados, al igual que en Azerbaiyán.
“NSO afirma que su software espía es indetectable y sólo se utiliza en investigaciones penales legítimas. Ahora proporcionamos pruebas irrefutables de que se trata de una falsedad absurda”, afirmó Etienne Maynier, tecnólogo del Laboratorio sobre Seguridad de Amnistía Internacional.
La filtración del Ministerio de Justicia de Israel
Más de un millón de correos electrónicos y archivos fueron filtrados desde el Ministerio de Justicia de Israel y obtenidos por el consorcio internacional de periodistas, Forbidden Stories, que revelaron cómo el poder Judicial israelí confiscó información sensible de la empresa de ciber inteligencia NSO, en medio de una disputa legal con WhatsApp por espionaje con su Software Pegasus.
El gobierno israelí solicitó que se incautaran los archivos de la oficina de NSO en Israel, ya que la compañía se enfrentaba a un posible proceso de discovery (solicitud judicial de información), para influir en la demanda en curso presentada en Estados Unidos por WhatsApp contra la empresa, en un intento de evitar que se compartan secretos de Estado en procedimientos legales, según revelaron los documentos filtrados.
El Estado de Israel también trató de mantener en secreto la incautación y presentó una orden de censura, impidiendo de hecho que los medios israelíes publicaran información sobre el tema.
Estados Unidos financió la compra de Pegasus
A principios de este mes, el embajador de Colombia en Estados Unidos Daniel García-Peña confirmó, tras reunirse con altos funcionarios de la administración de Joe Biden, que fue el Gobierno estadounidense el que financió la compra del dispositivo de interceptación de comunicaciones, en el año 2021. Según declaró el diplomático en base a la información que le brindaron, la compra se realizó como parte de la cooperación en la lucha antinarcóticos.
García Peña también informó a la prensa que, tal como denunció el presidente Petro, el pago se hizo en efectivo, y que le solicitó al gobierno estadounidense la revelación completa de la información que fue recopilada durante los meses en la cual Pegasus estuvo operando.